Las personas mayores con afasia después de un ictus a menudo se sienten aisladas debido a su discapacidad comunicativa y tienen pocas oportunidades de conversar. Esta iniciativa, sobre la cual se ha realizado un estudio[1], tiene como objetivo ayudar a reducir el aislamiento de estas personas. Para ello, el proyecto ofrece a las personas mayores un compañero de conversación joven, un estudiante de logopedia, durante una hora a la semana.
De este modo, estos estudiantes obtienen una mayor comprensión del impacto de la pérdida de conversación tras un ictus y de la necesidad de la comunidad de cubrir esta necesidad por parte de personal especializado.
El programa beneficia por tanto a las personas mayores mediante el incremento de sus contactos sociales y a los jóvenes estudiantes al proporcionarles experiencias útiles para su futuro desempeño profesional.
[1] D. Scully, “The impact of the Visiting Aphasia Scheme (VAS) on the learning experience of speech and language therapy students” (2015).
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